Sigo en la “meseta"… pero no os preocupéis encontré un solución perfecta. ¿Cuál es? Anoten: me pongo a disfrutar lo bien que estoy así, o mejor dicho, a comparar como estaba cuando empecé la dieta y como estoy ahora. Recuerdo todas las cosas que no podía hacer ni por casualidad y si las trataba de hacer me agitaba, me lastimaba, tardaba mucho tiempo y me deprimía horrores por verme tan limitado. ¿por ejemplo? Ponerme las medias, si si, ponerme las medias. Hace seis meses no podía ponerme las medias y si lo intentaba me lastimaba las articulaciones, tardaba 14 minutos (algo que se hace en dos) y, además, me las ponía mal, torcidas, por la mitad y terminaba agitadísimo, un desastre. Ahora, hoy para ser más precisos, me las puse sin inconveniente, bien, sin problemas.
Esta es solo una muestra de los progresos que he conseguido, ¿quieren otro? Hace 180 días caminaba
Esto hago cuando estoy en una meseta como en la que me encuentro, me maravillo de los logros que he conseguido y los disfruto a más no poder y no sufro por los que aún no conseguí ¿y saben por que? Por que si sigo mi dieta y esta nueva forma de vida que he elegido, no perderé estos importantes logros que mejoraron mi calidad de vida exponencialmente, sino que, en no mucho tiempo conseguiré más, todos los que me propuse hace seis meses y más.
Uno debe disfrutar de los logros, hoy lo entendí, detenerse a la vera del camino, observar a nuestro alrededor, dejar que la vida fluya, si hacemos lo correcto, lo que nos dicta el sentido común (que para nosotros muchas veces es el menos común de los sentidos), lo que nos indican nuestros profesionales, sin duda, llegaremos más temprano que tarde a nuestro objetivo y no habremos sufrido durante nuestro pasaje desde la obesidad a la sanidad.
Buena vida para todos!!!