viernes, agosto 10

Te sientes como la mierda, yo también ¿y que?


Cuando dejas de bajar de peso y estás haciendo las cosas bien no debes preocuparte, ahora estoy en una de esas “mesetas”, que se le va a hacer… “triste la vida del gordo” no? Lo tomo con humor, pero muchas veces deseo mandar todo a la mierda, si, a la mismísima mierda, se los juro. En post anteriores he hablado en extenso de estos “momentos” ingratos que nos depara la “dieta” y siempre recomiendo pensar en lo bien que estamos y esperar, todo pasa amigos, en unos días verán que vuelven a bajar paulatinamente.

De todos modos es frustrante, esforzarse tanto y no ver resultados es decepcionante. Hoy estoy en uno de esos días de porquería y quería compartirlo con Ustedes. Es que no quiero transmitir un mensaje erróneo, no quiero que crean que soy siempre positivo, ni me siento bárbaro, cuando repaso el blog creo que muchas veces soy demasiado optimista o, mejor dicho, triunfalista y no es lo que deseo transmitir, definitivamente.

La depresión que tengo hoy la mitigo con mi psicóloga, no me rindo, no aflojo los controles, no me entrego, no me entregaré nunca y eso es lo que aspiro que tú hagas, o sea, podemos y tenemos derecho a sentirnos como la mierda, pero eso no debe hacernos abandonar nuestro rumbo, nuestra salud, nuestro futuro. Pensemos lo bien que estamos y lo bien que estaremos si seguimos haciendo el esfuerzo de cambiar de hábito con respecto a la comida y a la vida y, aunque nos sintamos mal, solo nos permitiremos eso: sentirnos mal. OK?. Todo pasa, los días de mierda también.

Un beso a todos y sigan adelante, y si no empezaron, empiecen, ya es hora, no?

lunes, julio 30

¿obesidad contagiosa?


Podíamos presumirlo intuitivamente, porque si come más el que tenemos más cerca... algo se nos pegará. Pero la cosa no es tan sencilla ni depende sólo de la alimentación. Están también los factores genéticos.

La prestigiosa revista médica The New England Journal of Medicine publica en su último volumen un estudio de los doctores Nicholas A. Christakis y James H. Fowler que parte de un hecho: en los últimos 32 años, el número de personas obesas ha pasado del 23% al 31% en Estados Unidos, donde se considera que hasta un 66% de los adultos tienen sobrepeso.

Su investigación pretendía descubrir, mediante un examen de los 12.067 casos de obesidad recogidos por el Framingham Heart Study (un seguimiento oficial de enfermedades del corazón llevado a cabo en Framingham, Massachusetts, desde 1948, de gran influencia en el control de las dolencias cardiacas), si el hecho de que una persona gane peso repercute en que lo ganen sus amigos, hermanastros, cónyuges o vecinos.

Y las conclusiones son inapelables: en un periodo de tiempo dado, la posibilidad de que una persona se convirtiese en obesa aumentaba en un 57% si un amigo alcanzaba también la obesidad; curiosamente, entre hermanastros (con una genética común por padre o madre), esa posibilidad no era tan elevada, quedándose en el 40%; y entre cónyuges era aún menor, el 37% (quizá porque en ningún sitio se aprecia como en casa la curvita de la felicidad, y eso hace reflexionar a la pareja). Entre vecinos no se encontró ningún incremento de riesgo significativo.

Así que no hay más que hablar: vigile lo que comen sus amigos, porque de ellos nos viene principalmente el "virus".


fuente: Semana Digital

jueves, julio 26

CALCULADORA DE CALORIAS

viernes, julio 20

Un objetivo superior


Ups!!!! La normalidad está cerca. Dentro de 4 kilos y medio me voy a poder pesar en una balanza de piso, si, esas “familiares”, las que se encuentran en algunas farmacias, esas que el máximo que pesan es 120 kilos.

Quizás para aquellos que no han sufrido el sobrepeso que he soportado yo, esto signifique algo mínimo, insignificante, irrelevante, pero para mi, es motivo de festejo, es una alegría enorme, es algo tan, pero tan importante que necesito compartirlo, en este caso con Uds.

Pero cuidado, la normalidad está cerca, pero aún no llegué, faltan 25 kilos y lo que más me debe preocupar no es lo que me falta, es más, no me debe “preocupar” sino, lo que me debe “ocupar”, es que, al arribar a mi peso “saludable” no tenga tanta ansiedad que al lograrlo se convierta en desazón por no tener ningún objetivo a lograr. ¿se entiende?, A ver, si deseo algo ansiosamente como objetivo único y lo logro, automáticamente pierde interés el proyecto por que está “realizado”. De eso hablo cuando digo que el objetivo jamás debe ser llegar a determinado peso, debemos proponernos un cambio de hábitos perdurable y constante y, así, todos los demás beneficios, como lo es el lograr un peso saludable, o mejorar nuestra presión arterial, entre otros, arribaran a nuestra vida por añadidura.

Los quiero mucho, Buena Vida para Todos!!!!






jueves, julio 19

De verdad, no se sufre tanto adelgazando


Si quieres empezar a perder peso debes perder, primero, esa idea loca y dañina que se reduce a una frase de dos palabras “NO PUEDO”. Todos los obesos, sobre todo aquellos que padecemos de una obesidad mórbida, pensamos que no vamos a poder bajar o, algo peor, pensamos que si bajamos recuperaremos el peso perdido rápidamente, nos damos por vencidos antes de empezar, tendemos a creer que vamos a fracasar y todo lo que hagamos será un sacrificio inútil.

Si nos “cargamos” de ese preconcepto estamos “fritos”, lisa y llanamente “OUT”, definitivamente ACABADOS, se entiende?

No crean que soy el gordo optimista que por que bajó 35 kilos se siente un “ganador”. No, no, no, para nada, todo lo contrario. Todos los días elijo la salud y todos los días quiero comerme TODO, pero, también, todos los días me convenzo (de muchas maneras, como por ejemplo enumerando la cantidad infinita de cosas que ahora puedo hacer y antes no) de que así como estoy, me encuentro inconmensurablemente mejor de lo que estaba antes y eso, amigos míos, me da una fuerza de voluntad que me mantiene en el camino.

Pero les voy a dar una buena noticia, esa sensación de querer salirse todos los días del programa no dura para siempre, va menguando día a día, sucede que cuanto más tiempo estamos en el camino de la salud, mejor nos sentimos y “borramos” todas esas malas costumbres que teníamos antes, SI!!!! Mi experiencia me sorprende todo el tiempo, cada vez necesito menos auto-convencimiento, ¿saben por que? ¡¡¡por que ya estoy convencido!!!, parece una estupidez, pero no lo es, créanme, a medida que pasan los meses, me doy cuenta lo bien que estoy así y lo poco o nada que necesito ese montón de “cosas” que antes creía imprescindibles.

Créanme, engánchense, empiecen que no van a equivocarse, recurran a los profesionales y hagan terapia y les garantizo que van a lograr lo que yo estoy logrando. Si yo lo logré Ustedes lo lograrán, se los prometo.

Hay vida más allá del plato, un beso grande y ¡¡¡Buena Vida para Todos!!!

martes, julio 17

ANTES Y DESPUES


10 DE NOVIEMBRE 2006 - 16 DE JULIO 2007
NO SON MUY BUENAS FOTOS, PERO EL MENSAJE LO TRASMITEN, NO?