Si quieres empezar a perder peso debes perder, primero, esa idea loca y dañina que se reduce a una frase de dos palabras “NO PUEDO”. Todos los obesos, sobre todo aquellos que padecemos de una obesidad mórbida, pensamos que no vamos a poder bajar o, algo peor, pensamos que si bajamos recuperaremos el peso perdido rápidamente, nos damos por vencidos antes de empezar, tendemos a creer que vamos a fracasar y todo lo que hagamos será un sacrificio inútil.
Si nos “cargamos” de ese preconcepto estamos “fritos”, lisa y llanamente “OUT”, definitivamente ACABADOS, se entiende?
No crean que soy el gordo optimista que por que bajó 35 kilos se siente un “ganador”. No, no, no, para nada, todo lo contrario. Todos los días elijo la salud y todos los días quiero comerme TODO, pero, también, todos los días me convenzo (de muchas maneras, como por ejemplo enumerando la cantidad infinita de cosas que ahora puedo hacer y antes no) de que así como estoy, me encuentro inconmensurablemente mejor de lo que estaba antes y eso, amigos míos, me da una fuerza de voluntad que me mantiene en el camino.
Pero les voy a dar una buena noticia, esa sensación de querer salirse todos los días del programa no dura para siempre, va menguando día a día, sucede que cuanto más tiempo estamos en el camino de la salud, mejor nos sentimos y “borramos” todas esas malas costumbres que teníamos antes, SI!!!! Mi experiencia me sorprende todo el tiempo, cada vez necesito menos auto-convencimiento, ¿saben por que? ¡¡¡por que ya estoy convencido!!!, parece una estupidez, pero no lo es, créanme, a medida que pasan los meses, me doy cuenta lo bien que estoy así y lo poco o nada que necesito ese montón de “cosas” que antes creía imprescindibles.
Créanme, engánchense, empiecen que no van a equivocarse, recurran a los profesionales y hagan terapia y les garantizo que van a lograr lo que yo estoy logrando. Si yo lo logré Ustedes lo lograrán, se los prometo.
Hay vida más allá del plato, un beso grande y ¡¡¡Buena Vida para Todos!!!