lunes, julio 30

¿obesidad contagiosa?


Podíamos presumirlo intuitivamente, porque si come más el que tenemos más cerca... algo se nos pegará. Pero la cosa no es tan sencilla ni depende sólo de la alimentación. Están también los factores genéticos.

La prestigiosa revista médica The New England Journal of Medicine publica en su último volumen un estudio de los doctores Nicholas A. Christakis y James H. Fowler que parte de un hecho: en los últimos 32 años, el número de personas obesas ha pasado del 23% al 31% en Estados Unidos, donde se considera que hasta un 66% de los adultos tienen sobrepeso.

Su investigación pretendía descubrir, mediante un examen de los 12.067 casos de obesidad recogidos por el Framingham Heart Study (un seguimiento oficial de enfermedades del corazón llevado a cabo en Framingham, Massachusetts, desde 1948, de gran influencia en el control de las dolencias cardiacas), si el hecho de que una persona gane peso repercute en que lo ganen sus amigos, hermanastros, cónyuges o vecinos.

Y las conclusiones son inapelables: en un periodo de tiempo dado, la posibilidad de que una persona se convirtiese en obesa aumentaba en un 57% si un amigo alcanzaba también la obesidad; curiosamente, entre hermanastros (con una genética común por padre o madre), esa posibilidad no era tan elevada, quedándose en el 40%; y entre cónyuges era aún menor, el 37% (quizá porque en ningún sitio se aprecia como en casa la curvita de la felicidad, y eso hace reflexionar a la pareja). Entre vecinos no se encontró ningún incremento de riesgo significativo.

Así que no hay más que hablar: vigile lo que comen sus amigos, porque de ellos nos viene principalmente el "virus".


fuente: Semana Digital

jueves, julio 26

CALCULADORA DE CALORIAS

jueves, julio 19

Un objetivo superior


Ups!!!! La normalidad está cerca. Dentro de 4 kilos y medio me voy a poder pesar en una balanza de piso, si, esas “familiares”, las que se encuentran en algunas farmacias, esas que el máximo que pesan es 120 kilos.

Quizás para aquellos que no han sufrido el sobrepeso que he soportado yo, esto signifique algo mínimo, insignificante, irrelevante, pero para mi, es motivo de festejo, es una alegría enorme, es algo tan, pero tan importante que necesito compartirlo, en este caso con Uds.

Pero cuidado, la normalidad está cerca, pero aún no llegué, faltan 25 kilos y lo que más me debe preocupar no es lo que me falta, es más, no me debe “preocupar” sino, lo que me debe “ocupar”, es que, al arribar a mi peso “saludable” no tenga tanta ansiedad que al lograrlo se convierta en desazón por no tener ningún objetivo a lograr. ¿se entiende?, A ver, si deseo algo ansiosamente como objetivo único y lo logro, automáticamente pierde interés el proyecto por que está “realizado”. De eso hablo cuando digo que el objetivo jamás debe ser llegar a determinado peso, debemos proponernos un cambio de hábitos perdurable y constante y, así, todos los demás beneficios, como lo es el lograr un peso saludable, o mejorar nuestra presión arterial, entre otros, arribaran a nuestra vida por añadidura.

Los quiero mucho, Buena Vida para Todos!!!!






miércoles, julio 18

De verdad, no se sufre tanto adelgazando


Si quieres empezar a perder peso debes perder, primero, esa idea loca y dañina que se reduce a una frase de dos palabras “NO PUEDO”. Todos los obesos, sobre todo aquellos que padecemos de una obesidad mórbida, pensamos que no vamos a poder bajar o, algo peor, pensamos que si bajamos recuperaremos el peso perdido rápidamente, nos damos por vencidos antes de empezar, tendemos a creer que vamos a fracasar y todo lo que hagamos será un sacrificio inútil.

Si nos “cargamos” de ese preconcepto estamos “fritos”, lisa y llanamente “OUT”, definitivamente ACABADOS, se entiende?

No crean que soy el gordo optimista que por que bajó 35 kilos se siente un “ganador”. No, no, no, para nada, todo lo contrario. Todos los días elijo la salud y todos los días quiero comerme TODO, pero, también, todos los días me convenzo (de muchas maneras, como por ejemplo enumerando la cantidad infinita de cosas que ahora puedo hacer y antes no) de que así como estoy, me encuentro inconmensurablemente mejor de lo que estaba antes y eso, amigos míos, me da una fuerza de voluntad que me mantiene en el camino.

Pero les voy a dar una buena noticia, esa sensación de querer salirse todos los días del programa no dura para siempre, va menguando día a día, sucede que cuanto más tiempo estamos en el camino de la salud, mejor nos sentimos y “borramos” todas esas malas costumbres que teníamos antes, SI!!!! Mi experiencia me sorprende todo el tiempo, cada vez necesito menos auto-convencimiento, ¿saben por que? ¡¡¡por que ya estoy convencido!!!, parece una estupidez, pero no lo es, créanme, a medida que pasan los meses, me doy cuenta lo bien que estoy así y lo poco o nada que necesito ese montón de “cosas” que antes creía imprescindibles.

Créanme, engánchense, empiecen que no van a equivocarse, recurran a los profesionales y hagan terapia y les garantizo que van a lograr lo que yo estoy logrando. Si yo lo logré Ustedes lo lograrán, se los prometo.

Hay vida más allá del plato, un beso grande y ¡¡¡Buena Vida para Todos!!!

martes, julio 17

ANTES Y DESPUES


10 DE NOVIEMBRE 2006 - 16 DE JULIO 2007
NO SON MUY BUENAS FOTOS, PERO EL MENSAJE LO TRASMITEN, NO?

domingo, julio 15

20 IDEAS y UNA DIETA

Aqui te dejo 20 ideas para tener un proceso de adelgazamiento más o menos agradable y una Dieta que te servirá para "engancharte" en ese proceso.
Pero no olvides hacerte un buen y profundo chequeo médico y acudir a los especialistas: médico clínico, cardiólogo, nutircionista y psicólogo.
Y es muy aconsejable que todos estos profesionales se especialicen en obesidad.
Ojala les sirva, BUENA VIDA PARA TODOS

jueves, julio 12

Adelgazamos el cuerpo más rápido de lo que lo hacemos en nuestro cerebro. ENTONCES ANTENTOS!!!


La obesidad es un trastorno alimenticio producido por; en parte, la tendencia genética, el medio dónde se desarrolla ese sujeto con tendencia genética a engordar y el componente psíquico, que es indispensable para que la enfermedad se desarrolle.

Digo todo esto para que nos preparemos para los cambios, no el genético (imposible, por ahora, de modificar), si no de los otros dos, el social y el psíquico.

Nada mejor que hablar de uno mismo. Hoy me encuentro con 35 kilos menos, todos piensan que es una suerte, que es bárbaro y si lo es, pero no me siento así, percibo otras sensaciones fuertes y devastadoras, estoy deprimido, sin respuestas, mal, definitivamente, mal.

¿Por qué? Es que estoy cambiando físicamente mucho más rápido de lo que puedo cambiar psíquicamente, en un año, a este ritmo, bajaré todos los kilos que me hacían sufrir y ponían en riesgo inminente mi vida, pero no habré cambiado mi psiquis, aquella que tenía cuando pesaba 160 kilos. ¿se entiende?

Mi estructura mental “extraña” a “aquel” Darío, este se mueve más percibe la vida diferente y la vida lo percibe diferente a él y mi mente no lo “registra” así, entonces empieza a resistirse, no quiere “perderlo”, todo cambio supone desafíos nuevos y, por ende, nuevos peligros y miedos, obviamente mi “cabeza” empieza a molestarse, incomodarse, defenderse.

¿Qué deberíamos hacer? En principio decir ¡¡ALELUYA!! ¡¡Me estoy curando!!, pero no, como no vamos a tener ganas de decir eso, busquemos una solución, cual es, ir a un profesional que nos ayude a encontrar las respuestas, no es tan difícil, si yo pude, ustedes, seguro, que podrán.

La única recomendación que les doy es la siguiente: no crean que van poder resolver este “estado pésimo de animo” solos, así que, no tarden en recurrir a un profesional, muchos, al no encontrar solución vuelven al “otro” que eran por que les resulta más “fácil” y eso es lo que hace que las estadísticas digan que los kilos que se pierden se recuperan, claro, casi nadie les dice los que yo les estoy diciendo y, al no saber, la mayoría caemos en la “trampa”.

Un Saludo a Todos… y Buena Vida



martes, julio 10

Un acto de amor (quiso ser un cuento)

El la amaba, más que a nada en el mundo, la conoció en la primaria, allá en su pueblo, desde que la vio se enamoró, le llamaban la atención sus rulos dorados, sus ojos verdes, esa nariz redondita, chiquita, esa mirada dulce, vivaz y pícara a la vez.

A los nueve años se pusieron de novios, ella tomo la iniciativa, a la salida de la escuela agarró su mano y él, muerto de vergüenza delante de sus amigos, la apretó fuerte. Fede tiene novia! Fede tiene novia!, le cantaban y él se puso todo colorado, pero nunca, nunca soltó la mano de la dueña de esos rulos dorados.....


sábado, julio 7

Hetemeel.com : Dynamic images



Hetemeel.com : Dynamic images

Me encantó esta idea de usar famosos para mandar "mensajes" contundentes, ¿no te parece?
entrá y divertite, es facilísimo...!!!!

viernes, julio 6

Comentario sobre un comentario "¿por que GORDOS NUNCA MÁS?

Un visitante de esta página me dejó el siguiente comentario: “Gordos tiene que haber siempre. Por esta puta página podéis joder la vida de mucha gente (joven más que nada) ¿Cómo que gordos nunca más? Cabrones de mierda...”.

Quiero dejar claro que, como habrán visto los asiduos al blog, no comento “comentarios”, valga la redundancia, y mucho menos los critico.

Pero esta vez haré una excepción, no en el caso de la crítica, pero si hablaré sobre algo que, a la luz de esta observación, creo que debo explicar.

Cuando elegí el nombre del sitio, lo hice con mucho cuidado y pensando cada una de las palabras y el concepto de cada una de ellas y el de su conjunto. Fueron apareciendo en mi mente varios nombres: blogordo, “gordos al Ataque” y otros. Pero no quería ponerle humor a algo que no lo tiene en si mismo, sin perjuicio que si lo tenga en su hechura, en infinidad de oportunidades uso el humor y mis lectores también. Pero no quise que el nombre diera a entender que podía tratase de un lugar donde se tomara el tema de la “gordura” y/o obesidad en broma.

¿Por qué Gordos Nunca Más?, vean, todos nosotros, los obesos, sobre todo los que tenemos más de 40 kilos de más para arriba y más de 30 años, casi con total seguridad hemos tenido, por lo menos, un episodio de baja importante de kilos en alguna etapa de nuestra vida hemos tenido. Algunos hasta dos y a veces tres. Y también, todos, hemos vuelto a recuperar el peso perdido e, inclusive, a superarlo ampliamente (yo una vez bajé 40 y aumente 60, ¿que chiste no?). Ese tipo de hechos marca la vida de los obesos en todo el mundo, es más, las estadística marcan que la mayoría de los que comienzan una dieta, recuperan el peso perdido más temprano que tarde.

Se que me estoy extendiendo, pero creo que vale la pena. Sigo, después de muchos intentos, marchas y contra marchas, pocos triunfos y muchos fracasos; después de consultar profesionales y evaluar costos-beneficios me he dado cuenta y estoy convencido que, si no producimos un cambio en nuestra psicología, si no hacemos terapia con especialistas idóneos, si no cambiamos nuestra forma de relacionarnos con los alimentos, nuestro medio, nuestra pareja, etc. etc. NO PODREMOS DEJAR DE SER GORDOS NUNCA MÁS, Así nos extirpen todo nuestro aparato digestivo, encontraremos la manera de engordar, por que nuestra obesidad, en gran porcentaje, está en nuestra psiquis y existen hoy ejemplos de personas que se han practicado la cirugía bariática y hoy están gordos otra vez y sino, piensen en uno de los más famosos. Tenemos una especie de adicción a la comida y las adicciones se tratan en psiquiatría, no en cirugía. Hoy en Estados Unidos el tiempo que los cirujanos “serios” se toman para que alguien esté en condiciones de practicarle el bypass gástrico es de ¡nueve meses! y esos meses son de terapia y dieta, si no soportan la dieta es que la terapia no funcionó o, seguramente, el paciente necesita más tiempo en ella y postergan la operación para cuando el psicólogo les de el OK.

Como soy un convencido que todos los obesos que no tenemos una patología que vaya más allá del, hoy tan mentado, “síndrome metabólico” o “comes como un animal”, que es más o menos lo mismo, podemos bajar de peso si hacemos una dieta correcta, la única manera de mantener ese peso, es si hacemos terapia y corregimos la forma de pensar de nuestro peor enemigo, nosotros mismos.

Y ahora arribo al por que del nombre de la página. Si podemos, como lo hemos hecho en algún momento de nuestra vida, bajar muchos kilos, es que podemos dejar de ser “gordos”, por un tiempo al menos, mi intención y mi creencia es que si hacemos la corrección de la que les vengo hablando, podemos dejar de serlo para siempre, o sea, “GORDOS NUNCA MÁS”, por eso el nombre y perdón por lo extenso del post.

Los quiero mucho y Buena Vida para todos.

Pd: gracias al “anónimo” que dejó ese comentario que me permitió explicar algo que no había explicado bien. En serio, muchas gracias.

martes, julio 3

Estresado y barrigón


Que las personas sometidas a estrés crónico son más proclives a desarrollar el tipo de obesidad que se asocia con un mayor riesgo cardiovascular -la abdominal- es algo comprobado desde hace una década.

Aunque son varios los mecanismos implicados en la obesidad asociada al estrés, es una hormona, el cortisol, el principal nexo de unión entre estrés y obesidad descrito hasta ahora, aunque se van aportando nuevos factores.
El cortisol se produce en la corteza de la glándula suprarrenal ante el estímulo del eje hipotálamo-hipófiso-suprarrenal, y puede transformarse en cortisona, al igual que la cortisona puede transformarse en cortisol. Ante un estrés mantenido, puede producirse hipercortisolismo, lo que induce una menor respuesta de esta hormona por bloqueo de su receptor e incrementa la grasa abdominal.

Enseñale a tus hijos que la obesidad es una enfermedad


Si vemos a nuestro hijo o sobrino o nieto burlarse de un niño lisiado o ciego o sin brazos lo reconvendríamos inmediatamente, el reto sería tal, que el niño lo recordaría por mucho tiempo, quizás hasta su adultez. Lo sermonearíamos un buen tiempo diciéndole cosas tales como: ¿Cómo puedes burlarte de otro ser humano con semejante enfermedad o discapacidad? ¿No ves que ese niño está sufriendo? ¡¡¡Y tú te ríes de eso!!! O seguramente iríamos más allá: ¡¡¡Dios te va a castigar!!! ¿Cómo puedes mofarte de un enfermo? ¿Qué crianza te han dado?.. etc. etc.

¿Saben donde voy, cierto?

Claro, si el niño se mofara de otro que fuera obeso, nadie ni siquiera lo notaría, por que es altamente probable que nosotros mismos nos hayamos mofado de algunos cuantos en nuestra vida o lo hacemos todavía. ¿Y saben que?, ese niño obeso, sufre, está enfermo, se siente discriminado, apartado, ese niño tiene miedo, siente dolor y no sabe que hacer, por que es solamente es un niño.

La Sociedad durante muchísimos años estigmatizó a los obesos, a los gordos y los fue estereotipando en una suerte de “bola de grasa” que nos “divierte” y, algunas veces, nos da hasta ternura o lástima.

Eso debe cambiar, eso está, muy lentamente, cambiando, pero debemos hacérselo notar al otro, no se avergüencen de llamar la atención de cualquier persona que esté “maltratando” a un obeso por su condición, háganselo notar, en privado o en público, si todos lo hacemos veremos cambios, muy pronto.

Mucha gente, sobre todo aquella que no sufre esta enfermedad que es la obesidad, no sabe o no entiende bien de que se trata, así que es hora de explicar.

Estoy seguro que mucha personas van a tomar conciencia y van a empezar a respetar a los enfermos de obesidad y, es más, a solidarizarse con ellos, o sea, nosotros.

Así que a prestar atención y a no dejar pasar nada, también tener el respeto de la comunidad es nuestro derecho.

Buena vida para Todos.








domingo, julio 1

CUESTIÓN DE PESO: ¿"REALITY CRUEL"?


¿”Cuestión de Peso” (el programa de TV que se emite por canal 13 de Buenos Aires) es un reality cruel como dicen las críticas?

Yo opino que si, en el total sentido de la palabra, es un REALITY y es CRUEL, ¿Por qué?, ¡¡¡Obvio amigos!!!. Muestra crudamente la realidad (reality significa “realidad” en inglés) y como, la realidad, es cruel, (a no ser que crean que, todo el abuso que reciben los obesos de parte del Estado, la sociedad, el mercado, las empresas de vestimentas, los medios que emiten cualquier “producto” milagroso sin siquiera chequear si sirve o no o los discriminadores de siempre que solo recurren a los gordos para estafarlos, no sean cosas crueles).

No me parece un dislate decir que “cuestión de peso” sea un reality cruel, dejando bien claro que ni la “realidad”, ni la “crueldad” la ponen los productores del programa, ni su conductora, la bella Andrea Politti, ni el Dr. Cormillot, ni los demás que hacen posible que todas las tardes sintamos que somos personas y no solo sujetos del mercado o pobres infelices en busca de salud que “todos” nos niegan o, algo casi peor, nos “venden” cuatro veces su precio.

Creo que Cuestión de Peso marcó un antes y un después en la visualización de la obesidad en la Argentina, este programa puso a mucha gente a pensar y dio motivos a otros para creer que la obesidad se puede revertir. También, por primera vez, se dijo que la obesidad es una enfermedad, cosa que muchos, inclusive obesos, negaron durante años.

Por supuesto que es un emprendimiento comercial, como cualquier programa de televisión de este lado del mundo, pero su contenido va más allá, su trascendencia dentro de la sociedad argentina marca un hito social, político y médico.

Estoy seguro que el Congreso se va a ver “obligado” a votar la Ley que impulsó el Dr. Cormillot desde CDP, por que los “representantes” (los intereses que representan no lo sabemos) no resisten un “cañonazo” televisivo como el del programa y cuando la ley se apruebe será merito de este “reality cruel”.

Aunque no lo crean, no soy un “fanático” de CDP, inclusive tengo algunas “diferencias” en algunos puntos con el programa, pero es tanto y tan grande el beneficio que ha y seguirá dando a los enfermos de obesidad de mi País que sería un necio si me ocupara de los contrastes y no divulgara y defendiera sus aciertos y logros.

Yo opino, que ante tanta estupidez televisiva, que se debate entre el tamaño del pene de un participante y en ver como una mujer se desliza en un caño, hemos perdido la capacidad de entender algo, más allá del morbo facilista y superficial, y hoy nos cuesta comprender que un programa de TV nos invite a aprender y a pensar.

Buena Vida para Todos.








Como siempre, como lo que quiero... pero...

Cuando pesaba 160 kilos, el 10 de Noviembre del año pasado (2006), comía lo que quería y en las cantidades que quería y hoy, 1º de Julio de 2007, con 125 kilos, también como lo que quiero y en las cantidades que deseo. ¿Qué ha cambiado? ¿Por qué habré bajado tantos kilos?. ……¡Claro! ¡¡¡Adivinaste!!! Cambió lo que “quiero” comer y las cantidades que “deseo”.

Lo ideal para una recuperación sostenida, saludable y, sobre todo, duradera es producir el cambio en nuestro DESEO, entender que lo que queríamos no era lo correcto, nos hacía daño y nos hacía sufrir y perjudicaba nuestra salud, nuestras relaciones, nuestro futuro y nuestra calidad de vida. Que tampoco nos hacía feliz, ni lo necesitábamos y que no solucionaba nada, todo lo contrario, empeoraba todo. Razonar que si cambiamos el DESEO, no “perderemos” nada más que kilos de más, que sobran, que no necesitamos y ganaremos mucho, tanto como salud, relaciones “sanas”, nuevos horizontes, normalidad, control de nuestras vidas, libertad en nuestros actos y muchas cosas más, muchas más.

Querer lo que nos hace bien incluye un ejercicio casi épico, debemos trabajar todos los días, ayudados por profesionales, como siempre, en un reconocimiento de este hecho, que cosa nos hace bien y cuales no.

Hoy quiero comer lo que me hace bien, lo saludable, reconozco nuevos sabores, satisfacciones que nunca había logrado tener, sé cuales son las porciones, con que frecuencia debo comer, como resolver mis conflictos internos y externos sin tener que recurrir a la comida o al confinamiento de la gula, de la desproporción.

Hoy quiero, sobre TODO, estar BIEN, CONMIGO Y, ASÍ, CON LOS DEMÁS, por eso digo que HOY COMO “LO QUE QUIERO” Y ME HACE BIEN.

Te invito a que encuentres tu camino hacia la salud, como lo hice yo y les agrego algo muy importante amigos, si yo lo conseguí, lo puede lograr cualquiera que se lo proponga, se los garantizo.

Buena Vida para todos.