miércoles, octubre 31

LA OBESIDAD Y LA PSIQUIS


Como saben siempre, pero siempre, siempre recomiendo, sin dudarlo ni un instante, la necesidad imperiosa de hacer terapia psicológica para poder tener alguna posibilidad de curarse de la

enfermedad que es la obesidad. Es impensado, para mi, una baja de peso sostenida y mantenida a través del tiempo sin psicoanálisis y creo, a rajatablas, que sino nos sometemos a una evaluación psicológica seria y con profesionales especialistas en obesidad y/o adicciones es muy, pero muy difícil vencer definitivamente a la obesidad. Esto que digo desde hace ya un año quedó comprobado en un estudio que transcribo para que Ustedes saquen sus propias conclusiones, un beso a todos y BUENA VIDA

Muchos candidatos a cirugía obesidad no superan test psíquico

30 de octubre de 2007
Por Amy Norton


NUEVA YORK (Reuters Health) - Las evaluaciones psiquiátricas prequirúrgicas pueden identificar adecuadamente a los pacientes que aún no están preparados para someterse a una cirugía contra la obesidad, afirmó un nuevo estudio.

Investigadores del Hospital de Rhode Island y la Brown University en Providence hallaron que de entre 500 candidatos para la denominada cirugía bariátrica en ese centro de salud, casi un quinto de ellos no aprobó el examen psiquiátrico inicial.

Esa decisión, afirmaron los expertos, se tomó con un alto grado de confiabilidad, lo que significa que distintos psiquiatras que analizaron la misma información llegaron a la misma conclusión.

Los resultados fueron publicados en Journal of Clinical Psychiatry.

La cirugía bariátrica, o para bajar de peso, puede ser una opción para las personas con obesidad mórbida y que no pueden adelgazar con dieta y ejercicio.

La cirugía para bajar de peso se puede realizar de distintas formas, pero la más frecuente es el cambio estructural del aparato digestivo para reducir la cantidad de comida que puede ingerir una persona.

En el bypass gástrico, por ejemplo, se crea un bolsillo pequeño en el estómago y se conecta una porción del intestino delgado con el bolsillo de modo que los alimentos no pasen por el resto del estómago y una porción del intestino delgado.

Los candidatos a la cirugía deben comprometerse de por vida a cambiar ciertos hábitos, como alterar drásticamente la alimentación y cumplir con los controles médicos. En cuanto a estos últimos, muchos pacientes pasan por un control psiquiátrico antes de aceptarlos para la cirugía.

"El objetivo no es privarlos de la intervención. El objetivo es identificar todo aquello que podría impedir el éxito o la seguridad de la cirugía", dijo el doctor Mark Zimmerman, autor principal del estudio.

En el estudio, dijo el autor a Reuters Health, uno de los motivos más frecuentes por los que no se aceptaban a los pacientes era "la angustia oral". En esos casos, las personas usan la comida para contrarrestar el estrés y las emociones negativas.

El problema, explicó Zimmerman, es que después de la cirugía, cuando las personas tienen límites en cuándo y cuánto comer, necesitarán encontrar otras formas de superar esas emociones.

Entre otros motivos frecuentes por los que los pacientes no aprobaban la evaluación psíquica estaban los atracones compulsivos y la depresión descontrolada que, como la angustia oral, impiden que los pacientes superen los desafíos posquirúrgicos.

No aprobar este examen inicial no significa que se les cierra el camino a los candidatos. "No es una luz roja, sino una luz amarilla", aseguró Zimmerman.

Casi todos los participantes del estudio que no aprobaron el examen psiquiátrico fueron derivados a terapia para superar el problema.

En el caso de la angustia oral, por ejemplo, es importante que las personas aprendan "estrategias alternativas para superarla" antes de la cirugía.

En el próximo estudio, el equipo analizará cuántos de esos pacientes aprovecharon la derivación terapéutica y aprobaron luego el examen psiquiátrico prequirúrgico.

FUENTE: Journal of Clinical Psychiatry, octubre del 2007











jueves, octubre 25

cirugía reparadora, no estética


Los obesos mórbidos que han bajado de peso por dietas exigentes, constantes y profesionalmente

monitoreadas y contenidad o aquellos que lo han hecho a expensas de una cirugía bariática o algo por el estilo, se encuentran con otro problema casi tan grave como la propia obesidad (digo casi por que no afecta directamente a su salud física, pero si la psicológica y mucho)cual es, la necesidad imperiosa de una lipo-aspiración y dermo-plastía para retirar el "faldón" de carne y grasa fláccida que queda después de una baja importante de peso. Y ¿a que no saben que? las Obras Sociales y los Hospitales Públicos no lo cubren en ningún porcentaje, argumentando que ellos no pagan cirugías estéticas. Nada más lejano de la verdad que esa definición, esta operación en estos casos puntuales ¡¡¡NO SON ESTÉTICAS ESTAFADORES DE LA SALUD!!! (¿estuve muy fuerte? ¡mejor!) SON REPARADORAS, como lo son el remplazo de un seno a una mujer que tiene un cancer de mama y deben extirparlo junto a su seno o a quien le tienen que remplazar piel por quemaduras o arreglar la nariz por un accidente, las Obras Sociales y el Estado se hacen cargo de estas cirugías por que son limitantes sociales, ¿y tener un faldón de piel arrugada y fláccida que te tape los genitales, que te impide usar un traje de baño, que no te permite andar en bicicleta por que lo chocas con las rodillas, no es limitante? ¿no es una "cicatriz" que nos aleja y paraliza socialmente? A estos HIJOS DE..L RIGOR hay que llenarlos de juicios para que entiendan que los gordos no somos unos imbéciles que nos creemos todo lo que nos dicen y seguimos pagando todos los impuestos para que ellos nos ignoren o engañen como si fuéramos estúpidos. El lunes voy a ir a mi Obra Social y después les cuento, besos BUENA VIDA PARA TODOS.










martes, octubre 23

GORDOSNUNCAMAS EN TV










domingo, octubre 21

ES TODO UNA CUESTIÓN DE ACTITUD

Como a Griselda a todos nosotros nos ha pasado lo mismo, empezamos con toda la “polenta” y al primer tropiezo nos “desmoronamos”. Es una situación común a todos y de fácil resolución si enfocamos el objetivo y no “sobrevaloramos” el tema. Deprimirnos es la primera reacción

que tenemos, somos expertos en fracasos así que SUPONEMOS que estamos frente a uno más de los tanto que hemos tenido, ESTE ES EL ERROR, esto es lo que no debemos hacer en ningún momento: SUPONER, estimar, prejuzgar, NO, no “anunciemos” la “derrota”, no presumamos, por que lo que realmente estamos haciendo es rindiéndonos antes de empezar a luchar. Si se detiene nuestro proceso de perdida de peso puede ser por varias razones que no voy a enumerar ahora por que no quiero distraerme del tema principal de este “post”, pero, si estamos haciendo las cosas bien, el motivo que fuere nunca significará, ni por asomo, que hemos perdido la posibilidad de seguir bajando, NUNCA JAMÁS, debemos hablar con nuestro médico y el sabrá que hacer o que recomendarnos. Y si no estamos haciendo las cosas bien, si nos hemos “descarrilado”, es una BUENA NOTICIAS que se haya detenido el descenso, por que eso significa que somos normales, si comemos bien, bajamos y, si lo hacemos mal, aumentamos, SOMOS NORMALES!!!!. Este camino a la sanidad está plagado de momentos como estos, por eso es tan importante hacer terapia, hablarlo con nuestro profesional y conseguir “herramientas” que nos permitan superar cada uno de ellos. Y recuerden amigos, todo es una cuestión de ACTITUD, no te dejes caer, eres la persona más IMPORTANTE de tu VIDA.
MUCHAS SUERTE Y BUENA VIDA PARA TODOS











miércoles, octubre 17

Un post rescatado de cuando había bajado 25 kilos


“A veces cuando pienso que todo está perdido / voy hacia algunas de las formas de la muerte…”
El genio de Fandermole nos trajo estos versos en su tema “El Témpano” que sonaba allá en los 80´ en mi querido Rosario..
Es tan simple y tan apabullante la síntesis

que hace en estos dos versos que me hizo temblar el corazón.
Hoy mirándome en el espejo no percibí los 24 o 25 kilos que llevo perdidos desde el 10 de noviembre del año pasado, no me di cuenta de lo bien que me sentía, no conté que mi cuerpo estaba más a mi alcance que hace 6 meses, que ya no tenía que volver a casa para ir al baño por no poder higienizarme en un baño público, que ya no rechazaba caminar un par de cuadras, al contrario, ahora las hacía sin cansarme, asombrándome, disfrutándolo; que ya no esquivaba una escalera de 5 escalones, que me puedo levantar de las sillas con apoyabrazos sin llevármela encajada, en definitiva, no notaba el enorme progreso que había experimentado los últimos 188 días.
En el espejo veía un “gordo” el mismo de antes y en mi mente aparecían todo tipo de sentencias: “al pedo hago dieta, mira como estoy”, “al final ¿tanto sacrificio para esto?”, “no como nada y la ropa me queda cada vez peor” y todas por el estilo.
El camino a la salud está apenas pavimentado con nuestra débil voluntad y lleno de terribles pozos que producen nuestro entusiasmo por abandonar todos los días la dieta. Y Es así, en algún momento tenemos la enorme facilidad de encontrar las más originales excusas que nos permitan desertar. Somos los Adalides del desánimo, los arquetipos de la frustración.
Por eso es tan importante la terapia, la psicología, encontrar los mecanismos que desbaraten este intríngulis que se nos presenta cada vez que estamos consiguiendo nuestro objetivo. Ni el cirujano, ni el clínico, ni el nutricionista sabrán que hacer ante este conflicto. Solo un buen psicólogo podrá darnos herramientas para elaborar estas situaciones y resolverlas.
Creo que todos los que padecemos esta enfermedad que es la obesidad somos altamente vulnerables, por esa razón debemos reforzar nuestra auto estima y nuestras defensas para que esos momentos en que nos embarga un impulso por desistir tengamos una “cuerda” que nos rescate y nos ponga otra vez en el buen camino.
Hoy mis “cuerdas” fueron tres meses de terapia y estos dos versos: “A veces cuando pienso que todo está perdido / voy hacia algunas de las formas de la muerte…”.











martes, octubre 16

OJO!!!!


Amigas, amigos seamos responsables, así podemos exigir responsabilidad de los demás. ¿Por qué digo esto? Por que nos pasamos

diciendo que no debemos automedicarnos, no debemos correr, como galgos al conejo, a todos los que nos dan “recetas” “milagrosas” e insistimos hasta el hartazgo con la recomendación de que debemos consultar a profesionales y, de golpe y porrazo, salimos recomendando dietas, asesorando, inculcando. Sé que todos hacemos eso, tendemos a recomendar cosas que, creemos, nos hicieron bien, que, probablemente, nos hayan hecho bien y que quizás, SOLO QUIZÁS, al amigo al que se lo recomendamos le haga bien…… O NO. Esta duda, por mínima que sea, nos debe inhibir de hacer recomendaciones, ni de dietas, ni de medicamentos, ni de formas.

Contar nuestra experiencia no define nada, solo significa contar algo que nos pasó, el que escucha puede “verse” reflejado y sentir que a él le puede hacer bien hacer lo que hizo el otro para mejorar o superar tal o cual caso, pero, contar una experiencia, no implica inducir al otro a hacer algo, solo describe un hecho y su consecuencia, solo eso.

Dicho esto y sin ánimo de pontificar, los que participan de este blog saben que soy solo un mero participante más y no he censurado nunca ninguna opinión, como ejemplo basta un botón, los comentarios en este sitio no se filtran, ni moderan, les mando un beso a todos… a los nuevos les doy la bienvenida (el programa de TV, PLAN A nos conectó a nuevos amigos y amigas) y BUENA VIDA PARA TODOS.











sábado, octubre 13

Un post viejo, para recordar. Todos los días son un buen día para empezar


“¡…Yo no puedo empezar, me re cuesta…! ¿Ay Dios por que es tan difícil?”

Con estas palabras o parecidas, recibo cientos de correos de obesos que llegan a la página, me cuentan que les interesa muchísimo el tema pero se lamentan por no poder comenzar con el proceso. Todos tienen la “intención” pero no se animan, no creen poder o simplemente le temen a un fracaso más.
Quiero decirles a todos que los comprendo, que es corriente que eso pase, que no es un “castigo” divino y que el común de los obesos tenemos ese sentimiento pesimista cuando nos decidimos a hacer algo para perder esos kilos de más que sentimos que nos matan (y no sentimos mal, si seguimos engordando nos matan de verdad).
Esta bien que tengamos esa sensación, como les decía, pero también está bien que tomemos todos los recaudos para vencerla. ¿Cómo? No existe una sola respuesta, Cada uno de Uds. tiene la suya y es la correcta. Debemos buscar dentro nuestro esa pizca de voluntad que hará que surquemos las primeras 24 horas y después las subsiguientes y así, hasta no darnos cuenta que ya estamos re enganchados y sintiéndonos todos los días un poco mejor. El “Solo por Hoy” de los “alcohólicos anónimos” funciona perfecto en nosotros, díganse todos los días que quieren estar mejor, piensen en sus hijos, novias, amantes, madres, tías, vecinos amados, y todos a los que quieren bien y quieren que los vean bien… o… les doy una idea: piensen en alguien considerablemente mucho mejor PIENSEN EN USTEDES MISMOS y vayan al médico especialista y después a psicólogo, y al nutricionista y empiecen mañana mismo y si hicieron las cosas bien todo el día y a la noche se “excedieron”, no le pongan atención, no se sientan culpables, ni se depriman solo descansen bien y levántense sin remordimientos y ¡¡¡VUELVAN A EMPEZAR!!!! Por que Uds. tienen la respuesta y sabrán encontrarla, nunca es tarde para sentirse bien. Un beso a todos y Buena Vida!!!

lunes, octubre 8

trucos para poder salir


Hoy me preguntaban como hacía para ir a comer “afuera” y no tentarme a transgredir la dieta y yo le conté a mi interlocutor un par de truquitos que nacieron de mi propia experiencia y de mi

cansancio de prohibirme salir por no “perderme” en el intento. ¿Qué nos pasa siempre? Nos sentamos y nos comemos todo el pan o esa entradita que nos dan y el pan… o las galletas, o etc etc…. estamos aumentando considerablemente la cantidad de calorías que planeamos comer, sin siquiera disfrutar de ellas. Truquito uno: no nos sentamos hasta que llegue la comida… nos quedamos en la puerta del restorán… charlando o mirando vidrieras o leyendo el menú , u observando la decoración pero NO NOS SENTAMOS, truquito dos: nos chupamos un caramelo con azúcar, no sin azúcar, con azúcar…. Y lo saboreamos en la boca hasta que llegue la comida o hasta 5 minutos antes así no nos tentamos a comer nada, truquito tres: apio con catchup o mostaza o algún alineo Light hasta que llegue lo que pedimos para comer.
Es importante que salgamos a comer y disfrutemos de hacerlo, pero hay que prepararnos para ese momento previo que nos condena al final…. Un beso y buena vida para todos











miércoles, octubre 3

Aprender a vivir


Debo decirles, amigas y amigos, que la obesidad no es solo una

patología o un síndrome metabólico alimenticio o una enfermedad heredada o un desorden psicológico o todas estas cosas juntas. La obesidad es una manera, errada por supuesto, de defendernos de otras cosas que "creemos" son "peores" que la obesidad. Algunas vez, hace muchos años, leí un articulo que proponía el siguiente ejemplo: La vida es una especie de "espejo" que muestra todas las "cosas" que "habitan" en ella, el obeso al ir engordando va tapando el espejo con su cuerpo y, de esa manera, "tapa" todas esas cosas que no quiere ver, osea, enfrentar. Cuando comienza a bajar de peso empieza a "revelar" todas esas "cosas" que "tapo", entonces, después de un tiempo, otra vez trata de tapar el espejo por que no puede enfrentar esas "cosas" y vuelve a engordar. Perder peso significa que debemos hacernos cargo de cosas que antes no nos haciamos cargo excusándonos en nuestra obesidad, empezar a disponer de nuestras vidas normalmente y para eso no nos preparan las dietas. Por eso la importancia que tiene la ayuda profesional, la terapia nos previene de ese momento cuando vemos en el espejo de nuestra vida aquellas cosas a las que le tememos o no sabemos resolver, nos da las herramientas necesarias para "resolver" esos dilemas que, de alguna manera, nos empujaron a "escondernos" detrás de esa masa de kilos. Los quiero mucho, nunca me falten y Buena Vida para Todos










martes, octubre 2

No, consejos no


SI TE CAES DIEZ VECES , TE LEVANTAS,
OTRAS DIEZ, OTRAS CIEN, OTRAS QUINIENTAS,
NO HAN DE SER TUS CAÍDAS TAN VIOLENTAS,
NI TAMPOCO , POR LEY, HAN DE SER TANTAS.... (Almafuerte)

La lucha es pesada, sobre todo para nosotros que bastante pesados estamos, pero se torna más pesada aún por los que se nos "cuelgan" tratando de ayudarnos y en vez de ayudarnos nos hacen el camino más cuesta arriba de lo que es.
A esos los "incondicionales", esos que nos "acompañan" con su cuerpito esbelto y su pesada retórica, que creen que por que ellos nacieron con un metabolismo veloz, sus cerebros tiene la misma condición y no se percatan que no tienen la menor idea de los que nos pasa y, mucho menos, como darnos una mano. Aléjense por favor, tengo un médico, una psicóloga, un cardiólogo, tengo...., tengo......, ¡¡¡¡tengo ganas de que me dejen de joder!!!! y se dediquen a sus cosas, que yo, si puedo librarme de ustedes, claro, trataré de dedicarme a las mías, soy O B E S O, NO BOBO....!!!! ¿OK?

Nos quieren tanto, que bien podrían informarse, para que, además de querernos, pudieran ayudarnos, hasta que eso no pase, tomen distancia.

Estoy un poquito enojado hoy, pero como dice mi psicóloga, tenemos que hacernos cargo, TODOS tenemos que hacernos cargo, nosotros de los que nos toca, pero los demás también.
Un beso a todos, los quiero mucho y Buena Vida